Sin que se note

Le puse un poco de imaginación
No fue un milagro con perdón de Dios
Jamás sentí esa fuerza en mí
Sin vanidad, sin ego ni ambición
Te digo, mas no sé si con valor
Pero coraje y esperanza sí

En tu mirar curé mi fiebre
Y fue de repente
Los naufragios me he tragado
Y las heridas ya no duelen

Sin que se note
Te miro bien sin que se note
Y la verdad que había en mí queda inmensa
De la rutina estaba presa
Sin que se note
Te miro bien sin que se note
Y la mentira que hubo en mí queda intensa
Desaparece, sólo muere
Y los miedos se disfrazan
Y se esconden para no ver el sol
Y se asustan hoy

No fue la suerte quien me lo enseñó
Me até a la fuerza que vivía en mí
Con siete llaves de imaginación
Ganó mi ansia y mi esperanza
Venció a mi mente desatada
Y así escapé de aquellas garras
Y al fuego eché miles de cartas y de palabras
Tesoros que no valen comparados con tu alma

Sin que se note
Te miro bien sin que se note
Y la verdad que había en mí es tan inmensa
De las promesas queda presa
Sin que se note
Te miro bien sin que se note
Y la verdad que había en mí es tan intensa
Ya no le teme a lo que quiere

Se ha deshecho del disfraz
Con el que oculta su mirada
Se ha entregado a la ilusión
De pelear por lo que ama
Corazones que se buscan
En aquellas madrugadas
Son corazones, son montañas
Que no se esconden, que se hablan

Sin que se note
Te miro bien sin que se note
Y la verdad que había en mí es tan intensa
De las promesas queda presa
Sin que se note
Te miro bien sin que se note
Y la verdad que había en mí queda inmensa
Ya no le teme a lo que quiere
Se ha deshecho del disfraz con el que se ocultó
No se asusta, no
No se asusta, no